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¿Qué es el nearshoring y por qué debemos aprovecharlo en México?

En los últimos meses muy probablemente has escuchado hablar sobre un término que se ha generalizado entre los especialistas en economía mundial y más específicamente entre los conocedores de este tema en nuestro país, esa palabra es nearshoring. ¿Pero cuál es su significado y por qué está de moda su utilización? ¿Cómo impacta este fenómeno en México?

Para entenderlo veamos primero algunos antecedentes:

1. Estados Unidos, durante la presidencia de Donald Trump (2016-2020), decidió emprender una guerra de aranceles con China, aumentando las tarifas hasta en un 25% a las importaciones provenientes de esta nación, esto debido al crecimiento económico del gigante asiático, que no fue bien visto por el gobierno estadounidense. Esto ocasionó que muchas empresas buscaron reemplazar a China por otros países donde se tuvieran mayores facilidades en impuestos, mano de obra barata y ubicación geográfica.   

2. Si hace algunos años la tendencia en la economía fue el “offshoring”, que significó trasladar fabricas a China para producir a bajos costos, el coronavirus evidenció la gran dependencia hacía este país, que desató la interrupción de las cadenas de suministro y cuyas medidas de confinamiento obligaron a cerrar centros de trabajo, con ello, las empresas empezaron a buscar alternativas que acortaran las distancias para mover su producción en el mundo.

¿Qué es el nearshoring?

El nearshoring, también conocido como relocalización, significa trasladar la fabricación de un país cercano a una posición geográfica más inmediata, en la que las empresas pueden beneficiarse.  Es una estrategia que buscan las compañías para mover también parte de su producción, con el fin de estar más próximo a su destino final. Esto permite integrar cadenas de suministro y busca aprovechar las ventajas de la ubicación, en lugar de recurrir a proveedores localizados en lugares más lejanos. En pocas palabras, es un modelo de negocio en las que las empresas subcontratan servicios o proyectos en un país cercano regionalmente a los grandes consumidores.

Aquí es donde entra México como un destino atractivo y estratégico, donde las empresas buscan aprovechar que nuestro país forma parte del T-MEC (Tratado entre México, E.U. y Canadá) y que se encuentra ligado al mercado más grande del mundo.  Este tratado comercial del norte aligera los aranceles, ya que alrededor del 80% de la producción industrial de México tiene como destino final los Estados Unidos.  

De acuerdo con datos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), se estima que México podría atraer alrededor de 35 mil millones de dólares por la relocalización, así como también la Secretaría de Economía informó a finales de 2022, que ya existían más de 400 empresas interesadas en establecerse en nuestro país, así como el aumento del 12% de la inversión extranjera directa.  Todas estas empresas podrían sumarse a las 830 extranjeras que se instalaron en México entre 2018 y 2022, según datos de la Asociación Mexicana de Parques Industriales Privados (AMPIP).

Ventajas del nearshoring

• Aprovechando que existen ya varios años de relación comercial con Estados Unidos, México cuenta con cadenas de producción y logística bien marcadas, además de que se comparte husos horarios con el país vecino, que se considera una ventaja para ubicar grandes centros de producción y coordinar las operaciones en ambas naciones.
• Aunado a lo anterior, México ofrece costos laborales más bajos que China, por ejemplo, mientras que en 2019 la tasa salarial de la mano de obra en México fue de aproximadamente $3.95 dólares por hora, en China era de $4.50 dólares, además de que existe ya una base sólida de trabajadores mexicanos en la industria manufacturera.   

Beneficios

Los sectores de actividad que más se beneficiarán con el nearshoring son la industria manufacturera, la electrónica, la automotriz, la aeroespacial, la tecnológica y la de servicios. Específicamente el sector automotriz ha empezado a proyectar para los siguientes años el establecimiento de plantas de manufactura en estados como Nuevo León (Tesla) y San Luis Potosí (BMW).

Desafíos

• Para inicios de 2023, estaban saturados más del 85% de los parques industriales, por lo que se requiere ofrecer por lo menos 13 millones de metros cuadrados, que hoy en día no existen o que sólo están en proyecto, por lo que se prevé que en los siguientes dos años podría existir una gran inversión para igualar o superar este déficit.
• Se requiere mayor certeza y certidumbre jurídica para que no se modifiquen las leyes a gusto de los gobiernos en turno y que la situación política y los niveles de violencia e inseguridad en nuestro país se reviertan.     
• Seguridad, mejores rutas de logística para trasladar mercancías, además de capacidad suficiente en los aeropuertos y puertos para su manejo. Adicional, crecer la infraestructura con una mayor producción de energías limpias, disposición de agua y vías de comunicación bien conectadas.
• Ampliar a otros estados, como el sureste, el efecto positivo del nearshoring, ya que hasta la fecha se ha concentrado principalmente en entidades de la frontera norte y bajío.
• La educación tiene que impulsarse para tener abundante mano de obra calificada, que puedan aprovechar las empresas que se instalen en México.

Finalmente, hay que destacar que es una gran oportunidad para nuestro país que no se debe desaprovechar, ya que este fenómeno puede tener una duración de meses o algunos años por lo que debemos adaptarnos a esta nueva tendencia comercial mundial.